D. Pedro y D. Domingo de Aguirre Basagoiti fueron los dos únicos hijos varones de una familia oriunda de Berango y cuyos antepasados habían fijado su residencia en el caserío familiar Landaida Barri para dedicarse al cuidado de sus tierras. Otros familiares ya habían embarcado con anterioridad hacia distintos destinos y fue concretamente su tío paterno quien les abrió camino en México.
Los hermanos Aguirre sufrieron grandes vicisitudes profesionales y personales provocadas por la inestabilidad política, económica y social de la época convulsa que les tocó vivir. A pesar de todo, demostraron su valía humana y sus grandes dotes para los distintos negocios que iban adquiriendo y pusieron en marcha (industria textil, explotación azucarera y de aguardiente, etc.).
En 1907, a la muerte de los hermanos Aguirre, su único sobrino D. Pedro de Icaza y Aguirre, recibió un generoso legado, con la encomienda de utilizarlo en obras de utilidad pública y de beneficencia. Este será el origen de las Fundaciones Vizcaína y Benéfica Aguirre.
Con el fin de dar a conocer mejor su historia y coincidiendo con el centenario de su muerte en 2007, la FVA publica un libro sobre “Los Hermanos Aguirre” (1907-2017), en el cual se conmemora y narra en detalle la vida de estos dos ilustres vizcaínos.
El 15 de abril de 2013 se celebra en el Auditorio de Deusto Business School en Bilbao un acto in memoriam de los ilustres Patronos Icaza. En dicho acto, la actual Presidente de la FVA, Dña. Mónica de Oriol, expuso una crónica “Lecciones de los que nos precedieron”, en la que también relata los distintos avatares acaecidos a los hermanos Aguirre a lo largo de su vida.